• Es tiempo de rosados

    Reproducimos el artículo de Gastroactitud escrito por el crítico Federico Oldenburg donde realiza una selección de los 10 rosados para este verano y donde no podría faltar nuestro Valdelacierva Rosé 2020.

    No son los únicos que nos gustan, pero esta variopinta selección de 10 rosados ilustra muy bien la diversidad que presenta hoy en España esta tipología, abarcando desde cuvées de lujo, vinos parcelarios, naturales, fermentados en barrica concebidos para la guarda y otros más sencillos, de trago fresco y amable.

    Siempre puntuales a una ecuación temporal más marketiniana que rigurosamente enológica, en las semanas previas al apretón del calor la mayor parte de las bodegas que producen vinos rosados presentan al unísono sus novedades y nuevas añadas.

    Como si se abriera la veda y el verano fuera el único momento del año en que se autorizara el consumo de esta tipología.

    Sin duda, los consumidores y también la hostelería tendrán buena parte de culpa en esta injusta condena, pero bien es cierto que con la calidad y la diversidad que están alcanzando los rosados de España resulta obligado revisar la temporalidad de su consumo: su momento ya no es solo el verano, así también como su lugar ya no es el chiringuito playero.

    Son vinos para todo el año y grandes mesas y restaurantes, dependiendo de los diferentes estilos, elaboraciones, variedades … Como los que presenta esta selección –caprichosa y arbitraria– que apuntamos para esta temporada: novedades y vinos que hemos vuelto a catar y recuperamos como recomendaciones que valen bien la pena.

    Valdelacierva Rosé de Lágrima 2020

    Valdelacierva
    D.O.Ca. Rioja
    PVP: 6,90 €
    75 cl
    Emma Villajos, enóloga de Valdelacierva, confirma el buen hacer de esta bodega riojana con este rosado de garnacha cuya irresistible frescura, adornada con brillantes notas florales, viene dada en buena parte por la sabia decisión de adelantar la fecha de vendimia en la zona de Tudelilla, con el objetivo de controlar el grado y preservar los matices fragantes de la fruta. Los cuatro meses de crianza sobre lías le aportan, además, una deliciosa textura.

     

  • La nueva imagen de Valdelacierva Rosé

    Bodegas Valdelacierva presenta la nueva imagen de su vino rosado de Rioja para la añada 2019.

    Valdelacierva Rosé muestra en su nueva imagen la sensibilidad de su elaboración. Este vino rosado tiene como base principal el primer sangrado de la uva garnacha procedente de Tudelilla, en la D.O.Ca Rioja.

    Valdelacierva Rosé es un rosado de lágrima que, con serigrafía y tintes cobrizos de elegancia en su etiqueta, destaca el detalle de la “V” característica de la bodega, que representa: valor, viñedo y Valdelacierva.

    Por otro lado, este rosado fue el representante de los vinos españoles por la ONG “Fashion for Relief” de Naomi Campbell hace unos años, así como mejor rosado en Rioja.

    Además, para su añada 2019 este rosado con esencia sutil cambia a botella borgoña. Con la renovación de imagen de Valdelacierva Rosé, Bodegas Valdelacierva cierra la renovación del portfolio de la marca de la casa, que cuenta con un crianza Valdelacierva 5!Renques, un Valdelacierva  reserva y dos vinos “Viñedo singular”: Montepedriza y Cantogordo que verán la luz próximamente.

    Sobre Valdelacierva Rosé 2019

    Este vino se elabora de las uvas de la variedad Garnacha de 40 años procedentes de la finca de “Recuenco” en la localidad de Tudelilla, finca de 1,5 ha pegada al monte a 550m de altitud. Podemos hablar de un Rosé de altura por las características del paraje en el que se encuentra. Rendimientos equilibrados de 4000kg/ha situada sobre un suelo pobre, su componente principal es arenoso y calizo, plantas antiguas con manejo de antaño; en vaso. Abonado sólo con estiércol y tratamientos clásicos (azufre y sulfato).

    La vendimia manual y cuidada exige mucho manejo de la planta, es por eso que se realizan las podas en verde, para optimizar recursos y comenzar la selección. Este es solo uno de los trabajos que se hace en campo para este Rosé. Para su elaboración, y tras una vendimia temprana, realizamos una maceración pre-fermentativa hasta que el mosto adquiera el color que buscamos para este Rosé. Posteriormente, se produce el sangrado natural del mosto y se realiza la fermentación alcohólica a temperatura controlada de 14ºC.

    El aroma es vital, el cuidado y el mimo durante toda su elaboración va encaminado a conservar los esteres aromáticos. Estos se encuentran en la piel de la uva y se transforman en los aromas tan elegantes de frambuesas y lácteos tan típicos de la variedad garnacha que se van integrando en esta transformación del mosto al vino.

    Durante los tres meses posteriores a la fermentación alcohólica realizamos el Batonnage durante 4 meses previos a su embotellado; que consiste en levantar las lías finas del vino periódicamente y mantenerlas en suspensión. Cuando el vino se mantiene en contacto con ellas, es bien sabido que a través de esta práctica los vinos son más estables frente a la oxidación, y por otra parte resultan más grasos y armoniosos.

    La nueva imagen de Valdelacierva Rosé, lágrima de Garnacha D.O.Ca Rioja

  • Elaboración del Vino rosado. Cuarta entrega

    La elaboración de vinos rosados se puede hacer partiendo de  uvas tintas o de una mezcla de blancas y tintas. En general se conoce por su color y se define como: vino obtenido de la fermentación del mosto procedente de la mezcla de uvas tintas y blancas, que una vez despalilladas y suavemente molturadas permanecen durante varias horas en contacto con los hollejos que les aportan el color y aromas característicos”.

    Se podría decir que es un tipo intermedio entre el vino blanco y el vino tinto. El color del vino es aquí una característica fundamental  que se obtiene prolongando durante varias horas el contacto entre el mosto y hollejos (pieles de uva).  Del vino blanco tiene la constitución general, su ligereza, su afrutado y una cierta analogía en las técnicas de vinificación.

    Una vez obtenido el color idóneo se extrae el mosto, separándolo de las pieles de uva. La fermentación se realiza en depósitos distintos con control estricto de la temperatura, al igual que en los vinos blancos.  Tanto en blancos como en rosados es importante extraer sus características frutales, por ello es preciso que la fermentación se realice a una temperatura adecuada, no superior a 20ºC.

     

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies