Frío acrecentado por una altitud de casi mil metros; viñedos prefiloxéricos donde nunca llegó la plaga que asoló Europa y casi toda España a finales del S XIX y principios del XX; cientos de parcelas pequeñas, atomizadas, de viñedos muy viejos, de subsistencia que cada año se la juega ante heladas y granizos pero que, de salir adelante, da vinos poderosos y expresivos, marcados por una fina acidez natural debida al clima extremo, que los hará frescos y elegantes. Esto es la Ribera soriana.

La denominación de origen Ribera del Duero se extiende por cuatro provincias castellanas, que son Burgos, Valladolid, Soria y Segovia; y por reste orden de importancia en cuanto a cantidad de viñedos y bodegas. Cuando se constituyó en 1982, once fueron las firmas fundadoras;y una de ellas fue la Cooperativa de San Esteban de Gormaz

 

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